El 8 de noviembre, Día de san Miguel Arcángel, la Iglesia Ortodoxa Búlgara rinde homenaje a los guerreros celestiales de la Luz y la Justicia. Son éstos los siete arcángeles Miguel, Gabriel, Rafael, Uriel, Sealtiel, Jegudiel y Barachiel. El arcángel Miguel es el principal de todos, es el líder del ejército angelical. En la noción de los búlgaros, es el que está más cerca de Dios y vela celosamente que se cumpla la ley de Dios. Los iconógrafos a menudo lo presentan con una balanza en la mano, midiendo los pecados de los mortales. Por eso el pueblo búlgaro le considera el principal guardián del Paraíso. Cuando el alma emprende el camino al más allá, el arcángel Miguel la separa del cuerpo.

En honor a este guerrero celestial, se suelen hacer sacrificios animales, con oraciones pidiendo salud y protección del ejército celestial. En este día, los creyentes dirigen fervientes oraciones a su ángel de la guarda y consagran sus hogares con agua bendita.

El día del ejército angelical es fiesta profesional de los agentes del orden público búlgaros. Se celebró por primera vez en 1924.