El presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski, pidió a sus compatriotas que limiten el consumo de electricidad, especialmente en Kiev, Odesa, Sumy y Vinnytsia, informó Reuters.

La agencia señala que esto sucedió en un momento en que Ucrania intenta restaurar su sistema energético después de los ataques rusos. En Jersón se instó a las personas mayores y vulnerables a prepararse para la evacuación voluntaria porque la ciudad se encuentra sin electricidad ni agua tras la retirada rusa.

El Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA) señaló que no hay una amenaza nuclear inmediata después del último bombardeo del domingo contra la planta de energía nuclear Zaporiyia ocupada por Rusia, la más grande de Europa. Los cuatro expertos del OIEA informaron que  "el estado de los seis reactores es estable. El combustible gastado, el combustible nuevo y los desechos radiactivos en las instalaciones de almacenamiento están intactos". Se informó que los edificios y equipos de la planta sufrieron daños. En Twitter el vice presidente de la Comisión Europea y comisario de Asuntos Exteriores, Josep Borrell, calificó los ataques contra la planta de Zaporiyia como una "aventura nuclear rusa" que es inaceptable y debe cesar.

En declaraciones a Le Journal du Dimanche, el ministro de las Fuerzas Armadas de Francia, Sébastien Lecornu, advirtió a Kiev que Rusia cambiaría sus tácticas militares en Ucrania este invierno, intensificando los ataques aéreos contra objetivos civiles y de infraestructura a expensas de las operaciones terrestres.

Según el Instituto para el Estudio de la Guerra ISW, con sede en EE. UU., en las próximas semanas las fuerzas ucranianas intentarán tomar el control de la zona de Kinbrug, en la orilla izquierda del Dniéper, informa UNIAN.