Hoy los cristianos ortodoxos dirigen sus miradas hacia la efigie de san Demetrio con la esperanza de recibir su protección celestial. La veneración hacia san Demetrio está ampliamente difundida en los Balcanes. Son múltiples los templos en toda Bulgaria que llevan el nombre del santo que en los iconos es representado como un soldado cabalgando un caballo rojo que con su lanza mata al favorito imperial, el militar Leah, que perseguía a las personas que creían en Jesucristo. 

La iglesia consagrada a san Demetrio en la aldea de Teshovo, acurrucada en los declives meridionales del monte Pirin, recibe a los creyentes el día de la fiesta con murales de colores vívidos que fueron renovados después de un largo proceso de conservación y restauración.  

Este complejo de templos y edificios fue construido en el periodo de 1843 a 1844 en el lugar de un templo ortodoxo más antiguo que probablemente existía entre los siglos VIII a IX. La consagración del templo tuvo lugar el Día de san Demetrio en 1871 y hasta hoy en día la fiesta es el evento más importante de la vida de la aldea. 

La iglesia consagrada a san Demetrio es una seudo basílica de tres naves, que ostenta un ábside semicircular. La cúpula pronunciada aumenta visualmente el espacio y la luz que accede en él, mientras que la acústica del templo es impresionante.

Los espléndidos murales son interesantes por la técnica que se utilizó al pintarlos y por las historias que cuentan ya que evocan historias de la antigua gloria del Estado búlgaro. 

El iconostasio monumental tiene tres filas: una real, otra festiva y una tercera que está consagrada a los profetas. El tallado en madera impresiona por las exquisitas figuras y los elementos entrelazados que fueron tallados con gran maestría en el nogal. Los iconos incrustados tienen un excepcional valor artístico, una gran parte de éstos son obra de Dimitar Molerov-Molera, insigne representante de la escuela de artes de Bansko. 

El magnífico templo desempeñó un papel decisivo en la conservación de la espiritualidad en la aldea de Teshovo. La aldea se encuentra en uno de los más alejados rincones de Bulgaria y allí residen unas 100 personas de avanzada edad pero a pesar de esto la iglesia es objeto de gran atención y cuidados. 

Cada año el 26 de octubre la Fiesta de san Demetrio reúne en la plaza visitantes de toda la región del sudeste de Bulgaria y de lugares más lejanos del país, así como de Grecia. Según las creencias populares, si los enfermos pernoctan en el templo en vísperas de la fiesta serán curados por san Demetrio. 

Versión al español de Hristina Táseva 

Fotos Elena Karkalanova, Facebook/Teshovo