Las fuerzas políticas parlamentarias han reaccionado con una fuerte dosis de escepticismo ante la excéntrica propuesta de Continuamos el cambio - Bulgaria democrática (PP-DB) de que el presidente Rumen Radev aplace  tres meses la entrega del segundo mandato exploratorio.

El GERB-SDS se mostró dispuesto a responder a la invitación del PP-DB para mantener conversaciones sobre la declaración con la legislación anticorrupción, pero subrayó que no apoyaría ni el segundo ni el tercer mandato. Según GERB-SDS, el retraso de tres meses solicitado por el PP-DB es una pérdida de tiempo. "La respuesta más honesta al pueblo es ir de nuevo a elecciones", subrayó Denitsa Sacheva, del GERB. 

"Traduzco del ‘gerberiano’: ‘palabrería - SÍ; lucha contra la corrupción - NO’ ”, comentó en "X" el copresidente del PP Kiril Petkov.

El partido "Renacimiento" anunció que apoyaría la declaración del PP-DB a cambio del consentimiento de 5 referendos: por la preservación del lev búlgaro, por la pertenencia a la OTAN, por el tratado de cooperación con EEUU, por el cese de la ayuda militar a Ucrania y en contra las sanciones a Rusia.

Los diputados de "Grandeza" no apoyarán la declaración, ni ninguna propuesta de gabinete, dijo la presidenta del partido, Albena Pekova. 

Los diputados del entorno de Delyan Peevski (sancionado en virtud de la Ley Magnitsky por corrupción), en el recién-dividido Movimiento por Derechos y Libertades (DPS), se han manifestado en contra de aplazar 3 meses la entrega de un segundo mandato. Según ellos, no hay posibilidad de gobierno tras el rechazo de un gabinete con el primer mandato. Por su parte, los mimebros leales al líder honorario del DPS, Ahmed Dogan, afirman que negociarían con el PP-DB.

El Partido Socialista Búglaro (BSP) está abierto al diálogo pero "sin restricciones previamente establecidas".

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