"El proyecto de la autopista Ruse-Veliko Tarnovo sufrirá cambios, pero de momento no se ve amenazado". Así lo ha afirmado el ministro de Desarrollo Regional y Obras Públicas, Iván Ivanov, que ha inspeccionado los avances de las obras de construcción de esta vía, en el tramo de la ciudad de Byala (parte de la ruta Ruse-Veliko Tarnovo). Ivanov ha subrayado que el proyecto tiene una importancia estratégica, ya que forma parte de la conectividad entre el norte y el sur del país y además funciona como corredor europeo de transporte, informa la corresponsal de BNR, Asya Pencheva.

El ministro Ivanov explicó que los autores del proyecto no habían tomado en cuenta el suelo de loess característico de la llanura del Danubio, lo que hizo necesario el uso de nuevas tecnologías en la construcción. "La tecnología elegida se aplica también en otros países. Lo nuevo en este caso es que, en cuanto a longitud y altura, esta autopista va a ser algo que no se ha hecho hasta ahora en ningún otro lugar del mundo", comentaba Ivanov. Las pruebas han sido un éxito y la construcción continúa.

El comienzo oficial de las obras de esta autopista, de 132,84 km de longitud, entre Ruse y Veliko Tarnovo se celebró el 3 de diciembre de 2023.