El Gobierno de Rosen Zheliazkov sobrevivió tras la quinta moción de censura cuyo tema era Seguridad interna y justicia. Con 133 votos “en contra” del total de 234 diputados, los representantes del GERB-CDC, DPS-Nuevo Inicio, el Partido Socialista Búlgaro y Hay tal Nación salvaron al Gabinete. Votaron a favor 101 diputados de Continuamos con el cambio-Bulgaria democrática, Alianza por Derechos y Libertades, MECH y Grandeza, sin ninguna abstención.  

La votación de la moción de censura fue acompañada por protestas. Antes del inicio de la sesión parlamentaria diputados de Continuamos por el cambio aparcaron automóviles frente a las entradas del estacionamiento de la Asamblea Nacional son fotografías del detenido alcalde de Varna Blagomir Kotsev y del teniente de alcalde de Sofía Nikola Barbutov. “Hoy Peevski y Borisov deberán caminar ya que la protesta en apoyo a Blagomir y Nikola no les permite entrar por la entrada de atrás del Parlamento con todos sus guardias. Ya es hora de que caminen entre las personas”, expresó su postura el ex primer ministro Kiril Petkov. Siguió un feo intercambio de ofensas entre el líder de DPS-Nuevo Inicio y el copresidente de Continuamos con el cambio Asen Vasilev, que se trasladó a la sala plenaria.

Posteriormente Renacimiento organizó una protesta antigubernamental al lado de la sede de la Asamblea Nacional. Los ciudadanos dijeron que continuarán con las protestas hasta que el Gabinete dimita, informó el reportero de BNR Nikolay Hristov.

“Los recursos de Continuamos con el cambio-Bulgaria democrática no son suficientes para ser una alternativa lo suficientemente potente del estatus quo”, comentó para BNR el politólogo Ognian Minchev. A juicio de su colega Gueorgui Kiryakov, “el papel de DPS - Nuevo Inicio se va fortaleciendo cada vez más” en esta mayoría y Gobierno, y los gobernantes dependerán cada vez más de Asen Vasilev y de su partido”.

“Este voto no triunfó y el Gobierno continua su labor encaminada a garantizar estabilidad en el país”, manifestó después de la votación el primer ministro Rosen Zheliazkov. Él comentó la tensión frente al Parlamento: “La política es ganar confianza y no sembrar odio. El lugar del debate está en la sala parlamentaria”.